Este libro de texto se aprobó en 1897 y se siguió utilizando mucho tiempo después, esta es la 28º edición.
Os iba a hacer un resumen de las cosas que más me habían llamado la atención, pero por su vigencia u obsolencia, no tiene desperdicio ninguno.
En él hay cosas como que hay que ducharse, comer con la boca cerrada, no pegar voces, hablar con educación, dejar los huesos y las raspas en el mismo plato, no ir por la calle como borregos y otras normas de urbanidad que también han quedado en desuso para muchos ;)
Viajeros del metro, ya en el 1800 se hablaba de higiene.
Pobres, amigos, dependientes y criados.
No señalar con el dedo, no hablar a voces.
Esta parte más de uno la desconoce al completo.
Señoras, susceptibles de agraviarse.
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