Te pasas la vida en el colegio recortando y pintando, sales del colegio y nunca más vuelve a coger unas tijeras que no sean las de la cocina, fatal.
Tenía en el salón una mesa de cristal de las de espejo abajo, de esas de toda la vida. Una de esas mesas infierno en las que cada mota de polvo se ve en la parte de arriba y se refleja en el espejo. Una mota -> dos motas, dos motas -> cuatro motas...
Así que hoy toca collage.
Seleccionas las imágenes, en mi caso tickets de sitios visitados y algunos paisajes de revistas.
Los pegas por debajo del cristal dando cola en la parte que se verá, porque me imagino que querréis seguir limpiando la mesa.
Añades un papel del tamaño de toda la mesa cuando ya has pegado todo para que la parte que se refleje en el cristal de debajo sea uniforme y YA.
Yo voy a meter un paso entre pegar todo y el pegar algo que tape todo el fondo: más capas de cola que empapen el papel y lo dejen un poco guarreado, para que parezca más viejo, pero va al gusto.
Efectivamente, no os he descubierto América, pero si os inspira para volver a recortar y pegar me vale.
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